»Y he aquí que Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo». San Mateo 28,20

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»Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo». San Mateo 28,20 Los acontecimientos mundiales nos hacen entender que el holocausto para los cristianos en el mundo ya ha empezado. La persecución ya ha empezado. En América, no derramando sangre, pero si negándole a los cristianos los beneficios necesarios en una sociedad. Un simple  ejemplo:  a los cristiano, no les he permitido en el trabajo, usar nada que lo identifique como cristianos, mucho menos hablar de nuestra fe. En el trabajo tienen que alinearse con el libre pensamiento e ideología de la administración.  Si en la entrevista de trabajo dice ser cristiano, le deniega el trabajo. 

Son momentos para tomar muy en serio nuestra vida espiritual, nuestra fe. Son momentos para ser modelos para la familia. Son momentos para levantarnos en una protesta sin cuartel al pecado… Nuestra consigna debe ser “NO PECAR”… Una vida llena de pureza en la virtud… sacrificada en la conquista de las virtudes… esas virtudes que nos lleva a vivir a Dios íntimamente.

Son momentos para vivir una moral intachable, para vivir de “cara a Dios”.

Dios nos llama a ser testigos suyos, siendo nuestra vida reflejo de la vida amorosa de nuestro buen Dios, que vive escondido, solitario y abandonado en el Sagrario.

Levantémonos valientemente a conquistar la santidad personal… a promover  la santidad de los nuestros… viviendo, obrando todo para gusto de Dios, por amor a Dios…

Seamos sumamente celosos con nuestra vida espiritual… la eternidad está en juego… En estos días, la eternidad está en juego; solo hay que mirar los acontecimientos mundiales para darnos cuenta que nos quieren robar la eternidad con Dios.

Seamos valientes, perseverantes, vivamos sumergidos en Dios, bajo el manto de nuestra amada Mater… con ella lograremos alcanzar la victoria final…

Dios con nosotros... hoy... hasta la eternidad…

Desde la Soledad del Sagrario