La ignorancia es atrevida, y mi ignorancia mayor. Por favor, dejadme opinar… si caigo en herejías,
perdonadme… si por el contrario mis palabras no tienen sentido, perdonadme…
escribo lo que se me ocurre pensar… lo que el corazón siente… escribo
simplemente expresando mi pobrísima opinión.
Si alguien se escandaliza a causa mía, por tanta ignorancia… perdonadme…
os pido… tened paciencia y leer con caridad mis pobres e ignorantes palabras… ¿Qué
no debí de escribir? Cierto… pero mi
corazon me impulsa a hacerlo… perdonadme…
Acabo de leer una
entrada de un blog, que no recuerdo su autor donde presentaba con mucha preocupación
las herejías del Santo Padre… leí cada
palabra con mucho deseo de conocer de que trataba. Aunque tenía muchas cosas que hacer, no pude
cerrar mi computadora… el alma, el corazón me pedían expresarme. Una inmensa lluvia de
preguntas, argumentos agolpeaban mi mente… pensaba en Dios… pensaba en el Papa
Francisco… pensaba… pensaba… y aquí el fruto de mis pensamientos…
Me pregunto si el Señor Jesús derramo su sangre por toda
la humanidad o solo por los que iban a responder a su llamado, creyendo y dejándose
bautizar.
¿Cristo escogió entre
la humanidad a quienes y por quienes iba
a derramar su sangre? Los verdugos, los que no creyeron en ese momento, los habitantes
de las naciones existentes que no se enteraron de los acontecimientos del
Calvario en esos momentos, todas las
generaciones de la humanidad hasta la consumación de los tiempos, ¿no fueron
elegidos por Cristo para participar de los frutos de su sangre derramada en el
Calvario?
¿Dios no murió por toda la humanidad? ¿Dios tuvo preferencias? Por otro
lado, ¿la sangre derramada de Cristo restaura toda la creación? ¿Y qué
significado tiene el restaurar toda la creación volviéndola hacer de nuevo?
¿Qué significa
derramar su sangre? Se nos enseña que la
ofensa cometida a Dios Padre por Adán y Eva tiene una connotación infinita, porque la ofensa cometida había sido hecha a
Dios que es infinito… y solo Dios mismo podía satisfacer con un acto que reuniera
en sí una satisfacción infinita para Dios. Es aquí donde Dios Hijo se encarna
en María y nace Jesús, que va a amar al Padre Dios con un amor infinito, que va
a obedecer al Padre Dios con una obediencia perfecta y va a buscar siempre
vivir la voluntad del Padre Dios con su vida y sus obras al agrado y al gusto
del Padre Celestial.
Me pregunto esa satisfacción
infinita que Jesús lleva a cabo, que el Padre Dios acepta y que vuelve a mirar
su creación con corazon de Padre y de
Creador… se limita al acto de dar y el acto de recibir entre Padre e Hijo… ¿y
no abarca en si el “sacar a toda la humanidad del castigo que la misma
humanidad, en Adán y Eva, se busco al despreciar la amistad con Dios, al no
seguir en la obediencia al Padre Dios? ¿No es esto una forma de “redención”… devolver la creación,
la humanidad de vuelta a Dios? ¿No es
esto una forma de liberar la carga que pesaba en las espaldas humanas?
Me pregunto: ¿acaso
las generaciones que habían muerto, y dormían en la región de los muertos, esperando
el momento de la satisfacción infinita que Cristo iba a pagar por ellos, ¿no es el fruto de una “redención”
la que viven cuando son liberados y enviados al Cielo o al purgatorio si así
Dios lo disponía?
Y si el pago de
sangre de Cristo es la deuda contraída por los hombres, ¿Qué fue lo que pago? ¿Qué
fue lo que compro? ¿Cuáles fueron los frutos para la humanidad el
pago de sangre de Cristo?
¿Acaso no es una forma de “redención”? Si los judíos que en ese instante estaban
en la Pasión creyeron por los acontecimientos dados en la misma… y si uno de ellos
llego a morir sin ser bautizado, ¿se perdió de entrar a la vida eterna? ¿La sangre de Cristo no tuvo valor sobre él
aunque el muere creyendo con toda el alma en Cristo como Salvador?
Dios conoce muy
bien el corazon de su criatura, el hombre. Dios sabe cómo somos. Y ese conocimiento de Dios hace que Cristo
prevea, me parece a mí, las consecuencias de las acciones del hombre. ¿No será por esto que Jesús instituye los
sacramentos? Los frutos de su sangre
preciosa iban a ser ignorados, despreciados, rechazados. Jesús en el Getsemaní vio muy bien todos los
pecados de la humanidad en especial las futuras generaciones… pero ¿acaso no sabía
ya de lo que el hombre era capaz de hacer contra Dios?
Si Cristo muere
dando la vida por toda la humanidad, pasada, presente y futura, reconocía que
no todos iban a aceptar su regalo de redención, o no todos iban a conocer por
no estar en lugar de los acontecimientos, (si es que fue una redención lo que
ocurre en el Calvario).
Era lógico que había que enviar a los Apóstoles a evangelizar, ¿acaso no
estuvo Jesús evangelizando por tres años? ¿No estuvo enseñado el Amor, la
bondad, la voluntad y la paternidad de Dios Padre?
¿Por qué el bautismo como respuesta a la fe del creyente entre otras cosas?
Si crees en Cristo, te bautizas… si te bautizas eres salvo…
Se me ocurre pensar en mi flaca imaginación. ¿Si el bautismo no completa,
sino es una consecuencia de la redención
hecha por Cristo en el Calvario? Si es que hubo redención en el Calvario. Además
es el medio utilizado para la entrada
oficial a la Iglesia fundada por Cristo.
En uno o varios de los pasajes evangélicos, Jesús dice: “no vuelvas a pecar”. Jesús conoce la naturaleza humana, frágil voluntad
del hombre, dado a caer en el
pecado, entonces no puede haber una redención
plena que no esté acondicionada a satisfacer la situación del hombre pecador…
Si el pago del precio de sangre dado por Cristo nos libera de la situación y
las consecuencias en que había caído el hombre por su pecado en el Edén, tiene que
existir algo en que el hombre que vuelve a pecar pueda recuperar los frutos de
la sangre de Cristo perdidos por sus pecados actuales. Y ese algo que hace que
la redención dada en el Calvario (si es que la hubo) se vuelva a recuperar son
los sacramentos.
Para recibir los sacramentos hay que participar de la Iglesia de Cristo. Si el bautismo nos abre las puertas de su
Iglesia, es de suponer que el bautizado abra su corazón a la fe en Cristo,
aceptando las enseñanzas de Cristo, y buscando la santidad como camino al
Cielo.
“El que crea y se bautice se salvará; y el que no crea se condenará.” Aparece
en el evangelio de San Mateo
Pero el bautizarse, para un católico en su larga o corta vida, garantiza la
salvación siempre y cuando este sin pecados… porque si se peca y muere en
pecado sin arrepentimiento no se salvo. Si
crees en Cristo no me garantiza la salvación porque si se peca voluntariamente
se pierde esa salvación… a menos que arrepentido se vuelva a recuperar las
gracias de la salvación en el confesionario.
Por lo tanto “El que crea y se bautice se salvará; y
el que no crea se condenará.” tiene unas condiciones... que es no pecar. No se
puede pensar que: “Creo en Cristo, me bautizo y ya… soy salvo… no me tengo que
preocupar. Cristo me dio la salvación por
la fe y el bautismo por lo tanto a vivir despreocupadamente…” No, no, porque todos los días se peca… y al pecar se pierde el alma de la salvación eterna
si no se arrepiente y van al sacramento de la confesión.
Me pregunto entonces que quiere decir ¿”Jesús es nuestro Salvador”? ¿Cuándo Jesús nos salvo, en el Calvario o en
el bautismo?
Nadie se escandaliza con mis palabras expuestas públicamente. Son
interrogantes y pensamientos de quien nada sabe ni nada conoce. Perdonad mi atrevimiento ante tanta
ignorancia expuesta.
Jesús y María lleven al Santo Padre a dar una explicación del agrado de
Dios… y a los teólogos y todos los educados en la Palabra de Dios… a entender
con claridad el mensaje de Dios…
Desde la Soledad del Sagrario
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