En la Navidad… también San José…

 

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Cuando el silencio habla… Vemos en la escritura que de San José se habla poco… lo suficiente nada más… El silencio lo dice todo…Así como de María no son muchos los textos, de José, son menos…simplemente desaparece de los evangelios… cuando se pierde y es encontrado en el templo… Aquí vemos nuevamente el camino de la humildad, desprendimiento, obediencia, confianza y abandono, virtudes encerradas en María y José, el silencio nos habla a cada uno, confiemos, escuchemos y abandonémonos en los brazos del Padre… Hoy lo hemos puesto junto a María y el Niño Dios, pero miremos más aun, él es la cabeza de la Sagrada Familia, el sostén, la seguridad, que el Padre le ha confiado, al darle a su propio Hijo como suyo, a la Madre de Dios, para protegerla… solo escucha y ama… No puede pasar inadvertido en esta navidad, es cierto miremos al niño, ahí debemos renacer, pero miremos su entorno, el amor de María y José, que abrazan al amor mismo, débil, en la pequeñez de nuestra carne, pero el creador nuestro Dios, que se hace pobre, para mostrarnos el camino de regreso…, de esta familia, ciertamente, ese regreso lo encabezo, José… Sigamos, sus pasos silenciosos, para abrazar a este Dios que nos llama una vez más.

P DANIEL