Hoy ha sido un día hermoso
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Hoy ha sido un día hermoso… dos misas… dos comuniones… dos encuentros íntimos
con mi adorado Jesús. ¡Qué banquete
ricamente delicioso!! ¡Qué delicia tan exquisita y tan tierna!! Es una pena que no se pueda comulgar tres veces
al día… hubiera ido corriendo a recibirte Jesús por tercera vez… sin dudarlo ni un
instante. Pero no se puede… y hay que
obedecer.
Ah, pero si puedo comulgarte, todas las veces que desee, espiritualmente. De esta forma no hay límites…y la Iglesia
impulsa la comunión espiritual, de gran beneficio para el alma que siente sed y
hambre de Dios. ..y ¿Cómo no sentirla?....
¿Cómo no poseer esa hambre y sed divina?… si Dios es sumamente sabroso…lo
más rico que el alma puede gustar.
Ya lo dicen los santos… esas almas pequeñas y grandes que al descubrir a
Dios ya no lo pueden dejar… ya no pueden sentir nada por este mundo, porque, Dios lo llena todo…TODO…
no importa la edad… todos los santos han tenido la misma experiencia… desde una
pequeña Nelly de 4 años, quien murió amando con locura a Dios…, hasta una Madre Angélica, que aun vive…
y no deja de hablarnos de Dios con su vida intachablemente santa…porque su vida
ha sido un derroche de amor al Dios que la enamoro perdidamente.
Si, ha sido una mañana hermosa este domingo. Ya en casa… con el tiempo disponible, mirando
de vez en cuando y de cuando en vez, durante el día, mi página de facebook,
encontraba cuantas almitas están sufriendo
la experiencia de la enfermedad.
Señor, pienso que la enfermedad es una experiencia sumamente dolorosa, pero
necesaria, amado mío, si no Tú no la permitirías… pero, Señor, que terrible es.
Un niño en su plena niñez salir con cáncer… es algo que destroza el corazón de
todos los miembros de la familia.
Una madre con niños pequeños, de momento encontrarse con una enfermedad
terminal, es sumamente devastador para la familia, para ella, para los pobres niños
que pueden quedarse huérfanos, para ese esposo que sufre amargamente los
embates de la enfermedad que socavan la estabilidad emocional de la familia y
no es para menos.
Un apóstol en la iglesia, lleno de sueños, de planes, dado al servicio de
los demás, con una vitalidad heroica en la donación de su tiempo, de sus conocimientos,
de su amor y caridad.. Siempre en la disposición de ayudar a tiempo y destiempo…
y de momento la triste realidad de la enfermedad que se levanta derrumbando
todos esos hermosos planes… esa vida dada en el bien de los demás… para gloria
de Dios… como una hormiguita que solo sabe trabajar dándose siempre.
No se puede evitar el temblor del azote hiriente, que causa esta experiencia no
buscada, pero recibida con temblor y aceptación
porque anda en beneficio del alma aunque nada se entienda… más aun cuando se
sabe que el tiempo se acorta y solo queda colocarse en las manos amorosas del
buen Dios… que si El quiere…puede darse un milagro esplendorosamente hermoso de
corriente de vida nueva que desplace la enfermedad por una larga prorroga de
vida… ¿y por qué no?... si para Dios no
hay nada imposible… un Dios de amor que puede decir: “Si quiero… queda sano”… Y
el milagro se da… si Dios quiere… y Dios siempre quiere nuestra felicidad.
La fe busca en todo momento levantar el alma descansando en la voluntad
divina… sin dejar de mirar con ojos de suplica por el gran milagro… a todos nos
pasa… no hay porque extrañarnos…y Dios conoce muy bien a sus hijos… me parece
que es cuando nos lleva en brazos, porque su amor no puede soportar las lágrimas y el dolor desgarrador de sus
hijos enfermos. Dios mismo nos consuela a todos en los diferentes momentos que
nos toca vivir.
Ya es de noche… reconozco que ha sido un día hermoso… aunque salpicado por
el dolor de los hermanos, de los hijitos que andan con el abrazo desgarrador de
la enfermedad… mi pequeña oración por todos ellos… mi constante petición a mi
adorado Jesús… por el milagro de amor… por una extensión de prórroga de vida…
para todos… para vivir una conversión verdadera, para dejar los lazos de una vida
sentimental ajena al gusto divino, para regresar a la vida de sacramentos con una
actitud humilde derrochando amor y esperanza… para crecer en la fe… para
convertirse en ese instrumento de amor en manos de la Inmaculada… porque la
Mater necesita la ayuda incondicional de almas que le quieran ayudar a llegar a
los hijos descarriados.
Si mi Jesús adorado… ha sido un hermoso día…un domingo dedicado a Ti y a las almas… ¡Bendito seas mi amado Jesús!!
Desde la Soledad del Sagrario
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