jueves, 7 de junio de 2012

¿CATOLICOS?


¿Católicos? Sí CATOLICOS…


 
imagen de sormaridel


Meditaba en estos días sobre los católicos, sobre la diversidad de católicos en nuestra Santa Madre Iglesia.  Hay que ver primeramente lo que es un verdadero católico.


En mis pobres palabras  “Católico”  es el que sigue  a Cristo, reconociéndolo, aceptándolo, estudiándolo, viviéndolo, amándolo, adorándolo,  glorificándolo, cultivando la amistad intima, gustosa y sabrosa con Cristo, alimentando el alma, la vida con su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad, participando de sus Sacramentos y de la comunicación asidua y perseverante que es la oración intima y comunitaria… y todo  según su deseo expresado y manifestado en su Santa Iglesia… fundada por El y dejada en manos de San Pedro y sus sucesores.


Católico es el que obedece a Cristo obedeciendo al Santo Padre y a sus sacerdotes.
El que sabe seguir instrucciones de sus superiores en el trabajo, el que sabe aplicar los mandamientos a cada situación del diario vivir que se le presenta… el que sabe que la fidelidad en lo pequeño conlleva con facilidad ser fiel en lo grande, en lo transcendental… que fortalece al alma para decir con firmeza y libertad NO a la tentación, al pecado.


Católico es la persona que vive cultivando virtudes porque sabe que necesita de estas herramientas para fortalecer su alma en aras a la santidad que Cristo llama a todos sus seguidores.


Católico es el que provoca hambre y sed de Dios en todos porque es la persona más alegre, más feliz, de un humor exquisito, trabajador incansable,  que a su lado vale la pena estar, derramando paz… compadeciéndose de todos… solidarizándose con los que sufren… ayudando a los necesitados sin importar raza, color, edad, nivel social,  educación… sino al contrario llevando la alegría de Dios a todos y en todo… porque Dios vale la pena.


Católico es aquel que sabe que vivir  a Cristo es vivir diariamente, minuto a minuto,  de a poquito a poquito, la Voluntad Divina en todo momento… dándole gusto a Dios y gran consuelo.


Católico es aquel que sabe llevar a Cristo a los demás sin necesidad de imponer,  ni de gritar, ni acosar, ni perseguir… sino que lo da en todo momento de su diario vivir… siendo otro Cristo para todos.


Católico es la persona que está plenamente y ciegamente convencida que Dios vive en el Sagrario… que Cristo se encuentra en el Misterio inefable de la Santa Eucaristía por eso la Iglesia es el lugar de encuentro con Cristo, donde las posturas, el recogimiento,  la vestimenta,  el silencio que guarda y manifiesta, su mirada recogida hacia Aquel que lo mira y lo espera con los brazos abiertos… brazos  divinos que desean estrechar a todos los católicos que se acercan con reverencian con temor y con santa humildad… todo en el, en ella hablan de respeto a lo Sagrado… porque “la tierra que están pisando es sagrada”… despojándose  de las sandalias de lo chabacano, lo irreverente, lo vulgar, de la distracción voluntaria,  del descuido a la presencia  Divina… porque Dios habita en el Sagrario.
 

Católico es la persona que no se pierde en dimes y diretes con los hermanos,  no se fija jamás… jamás… en los defectos ajenos, a menos que no sea para hincar rodilla ante Cristo y pedir, pedir, pedir la virtud en el hermano enfermo por los defectos,  es el que siempre está dispuesto a ayudar y servir a todos con santa alegría y santa humildad porque ve a Cristo en los demás sean buenos o pecadores…


Católico es aquel que sabe escucha con detenimiento,  haciendo sentir a los demás que le es grato escucharlo, que se interesa en lo que está diciendo,  prestándole toda la atención debida porque sabe que en esa alma se encuentra Dios y a Dios hay que escucharlo… que Dios le está  pidiendo para esa alma en particular…  


Católico es aquel que quiere llevar consigo al Cielo a todos los hermanos porque está convencido de la felicidad eterna que le espera y quiere que todos los hermanos también lleguen a participar de ella… por eso ora por la conversión de los suyos, de los amigos, de los vecinos, de los feligreses de la parroquia, de los conocidos y de todos porque Dios vale la pena.
 

Católico es el que sabe defender su fe sin herir sensibilidades, sin provocar heridas de enemistad en amigos, sin dejar de ser lo que es un enamorado perdidamente de su fe, de su Iglesia, de su Cristo.
 

Católico es el que ama intensamente a la Madre Celestial y como buen hijo le ayuda a llevar a los hermanos a aceptarla, conocerla, amarla, respetarla,  y sentirla como Madre sintiéndose hijo o hija de Madre tan singular y hermosa.


Católico es todo aquel que vive para Dios, en comunión con María, en fidelidad a la Madre Iglesia el día a día… sin detenerse a acumular riquezas en esta vida sino para la otra… sin buscar honores ni gloria… sino la gloria de Dios y el amor a la Madre… sin sentirse llamado a consumismo si no a vivir los pequeños detalles de la vida que llevan a sentir y alimentar  una vida simple llena de entusiasmo y de verdadera felicidad… viviendo y prodigando el amor a su familia y a todos porque sabe que Dios vale la pena…


La vida no es fácil… la vida es un continuo luchar por ser mejores… pero para el católico la vida es el jardín donde sembrar una buena cosecha para la eternidad…
porque Dios vale la pena… 


¿Católicos?    CATOLICOS… COMO LOS SANTOS DE NUESTRA IGLESIA…  ellos han sido, son  y serán  los mejores católicos de nuestra Iglesia… porque Dios vale la pena…

… ¿ y tú?


Desde la Soledad del Sagrario






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