Cuando un alma está descubriendo…
sensibilizándose al Amor del Padre
Dios….
Dios….
Arroyos de lágrimas corren por sus mejillas, al pronunciar “Papá”…
“Papaíto”… el silencio elocuente se apodera del alma… ante el Misterio
inconcebible, palpable de la Paternidad Divina… conoce con una claridad siempre
mayor que: “Papá la ama”… y el alma “ama a Papá” con una fuerza… con una
pasión… irresistible e invencible… porque ha entrado en el Corazón del Padre
Dios…
Padre…Madres conquistemos la oración… solo un alma sumamente orante puede
llegar a vivir una experiencia semejante. Ustedes tienen la necesidad de
experimentar el Amor del Padre Dios para poder llevar a sus pequeños a
descubrir la experiencia maravillosa de sentirse amados por el Padre… sentirse
que el Padre Dios es verdaderamente “Papa”… por lo tanto sentirse “hijos del
Padre Dios”.
Entre tantas cosas que perdemos el tiempo enseñándoles a nuestros niños esta
es la principal… Un encuentro verdadero con Jesús… una amistad intima, sabrosa
y verdadera, real con Jesús… les llevara a experimentar el Amor del Padre… No perdamos la oportunidad ni el momento… el
tiempo corre… los niños crecen… luego es muy difícil… no imposible… pero muy difícil.
Desde la Soledad al Sagrario
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